lectura recomendada: Las sabidurías de la antigüedad, contra historia de la filosofía I

Tenía algunas dudas de si incluir esta obra, Las sabidurías de la antigüedad, contra historia de la filosofía I, del francés Michel Onfray entre las lecturas que recomiendo habitualmente en este espacio virtual porque pese a que se trata de un buen libro y un libro necesario ya que presenta una parte casi inexplorada de la filosofía, me pareció al leerlo bastante irregular, aunque, probablemente, esta irregularidad se debiera seguramente al diferente interés que despertaban en mi los diferentes filósofos que se abordan en la obra. Por tanto y puesto que es posible que a otros lectores, menos kantianos y existencialistas, les interesen más esas mismas teorías y ya que se trata de un libro interesante finalmente he decidido otorgarle el antetítulo de lectura recomendada.

Respecto a su contenido, el título es ya bastante revelador, pero me parece que el breve texto de la contraportada del libro, editado por Anagrama, hace un resumen bastante aproximado de lo que el lector puede encontrar en esta obra, por lo que paso a añadirlo a continuación:

"La tradición del idealismo se extiende desde Platón hasta Kant y Hegel, dominando la historia de la filosofía a lo largo de más de dos mil años. Para Onfray es tiempo de contar la contrahistoria de la filosofía, la que reivindica el cuerpo frente al alma, el hedonismo contra el ideal ascético, el goce de la vida y no la preparación para la muerte. La historia de una filosofía materialista, una tendencia poderosa entre los griegos que luego fuera silenciada por el idealismo. Los manuales de filosofía no tienen nada de objetivos: son instrumentos con los que «la historiografía toma el lugar de la guerra» para seguir imponiendo su línea dominante. Además, esta obra demuestra que esa contratradición tiene grandes maestros: cínicos como Aristipo de Cirene o Diógenes de Sinope, materialistas como Demócrito y el poeta Lucrecio, hedonistas como Epicuro y Filodemo de Gadara. A finales del siglo XIX, Nietzsche señaló el camino; a principios del XXI Onfray demuestra que éste es el momento de liberarse del idealismo y abrirse a la otra tradición, la del hedonismo y el cuerpo."

También he recogido algunos de los pasajes que más me han interesado del presente volumen por cuanto me han hecho reflexionar y pensar sobre aspectos trascendentes de nuestra vida:

Demócrito (págs 72-75)

"Estrategias del hedonismo. El hedonismo comprende una parte que muy a menudo se olvida. El aspecto positivo de la investigación del placer deja casi siempre en la sombra a su correlato: la evitación del displacer. Ahora bien, tal vez sean más las satisfacciones que derivan de evitar una ocasión de sufrimiento, de padecer un dolor, de temer o de sentirse angustiado, que las que procura la búsqueda positiva de una alegría identificada como tal. Este placer negativo supone la posibilidad de experimentar una satisfacción real en no sufrir. La ausencia de turbación como generación de alegría tiene un lugar destacado las éticas eudemonistas y hedonistas griegas."

"Demócrito otorga una condición terapéutica al aumento del saber. Su trabajo enciclopédico, conocido como “la ciencia”, no aspiraba a la acumulación de conocimientos por sí mismos sino con el fin de llegar a producir causalidades racionalistas e inmanente que hicieran desaparecer las inquietudes y los temores. Descartar los dioses sus colegas, sus condenaciones y otros castigos, supone un trabajo acerca la licitación del pensamiento: ver en los encadenamientos de causas y efectos inmanentes la razón de lo que sucede, permite evitar gran cantidad de displaceres."

...( ¡! ) "Partidario de una franca y clara metafísica de la esterilidad, democrito invita a no procrear: es imposible lograr la educación. Es una tarea que está por encima de las fuerzas de cualquiera. Nadie puede cumplir correctamente con ella. Y una educación frustrada, sobre todo cuando se trata de los hijos propios, es un verdadero motivo de sinsabores. Los hijos son fuente de molestias, temores y angustias para los padres. Su salud, su porvenir, su vida, todo se convierte en un peso sobre las espaldas del padre o de la madre."

... "Democrito define asi el ideal: pasar la vida de la manera más feliz y menos taciturna posible. Sin medirse con el otro, sino siempre con este ideal como patrón. El otro no es la medida de uno mismo, se trata de apuntar a objetivos más elevados. En términos de ideal, el otro vale menos que un objetivo elevado como la vida feliz."

Hiparco (pags 80 - 82)

"Hiparco, por tanto, ofrece en realidad un vademécum del pensamiento hedonista: amar lo que acontece; no perderse en el pasado ni en el futuro; disfrutar el instante presente; transformar lo negativo en ocasión de positividad; evitar la visión egocéntrica del mundo y de las cosas; comparar el dolor propio con el de los demás. Y a esto agrega la práctica de la filosofía como ocasión de purificación, de sabiduría y de reconciliación de uno consigo mismo, con los otros y con el mundo. Si nos ocupamos del esplendor de la filosofía, alejamos la trivialidad del mundo a una distancia útil y necesaria para crear una vida feliz y alegre."

"El interés por lo que es debe ir acompañado el rechazo de lo que podría ser. No contentarse con lo que es y pensar el futuro, apostar y contar con las potencialidades de un porvenir posiblemente extraordinario es motivo de demasiados desengaños. La desesperación se presenta cuando se ha esperado, la decepción aparece cuando se ha confiado; lección de sabiduría: no confía, no esperar, no contar con... La filosofía hedonista invita concentrarse exclusivamente en la modalidad presente del tiempo: invita a no permitir que la nostalgia ni la proyección al futuro tenga ningún poder sobre nosotros."

"Otra lección capaz de generar alegría: en los momentos negativos, buscar y saber encontrar las razones que presenten un lado positivo. ¿Que los golpes de la suerte nos han privado de nuestra fortuna? muy bien, tendremos menos preocupaciones, evitaremos inquietudes, nos ahorraremos temores. ¿Que nos han despojado del poder? perfecto, la nueva situación nos liberará de frecuentar parásitos, tan abundantes en los lugares de poder y de dinero. ¿Que nos arrebatan amigos? excelente, quién sabe si no eran en realidad futuros enemigos que de esa manera queda felizmente fuera de juego..."

Y por último, una interesante reflexión de Lucrecio sobre la muerte (págs 270-271):

"Además ¿ Por qué habría que temer a la muerte si se ha vivido bien? Una vida feliz, plena, en la que no hay nada de que lamentarse, conduce a la serenidad; el sentimiento de logro cumple la función de todos los sedantes juntos; de la misma manera, si se ha llevado una vida siniestra, deplorable e inuútil, no hay ningún motivo para lamentar el final de tan triste partida. En ninguno de los dos casos -vida lograda o vida gracasada, y nadie escapa a esta alternativa. Es la muerte una catástrofe, sino simplemente una ocasión de poner punto final a una experiencia feliz o de acabar de una vez con un valle de lágrimas."